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jueves, 14 de enero de 2010

EL ESPÍRITU ETERNO


PRÓLOGO:

<<…Y sólo la Muerte rondará por el Mundo, y el Mundo quedará desierto hasta que la misma Muerte se apiade de él y Dios decida si concede una segunda oportunidad>>.

Con esta escalofriante frase culmina este libro, cuya autora es Elena Jiménez Pérez, profesora de Didáctica de la Lengua y la Literatura en la Universidad de Málaga, experta en comprensión lectora y Nuevas Tecnologías. Directora de la revista filológica de la UVILCE e hispanista reconocida por el Instituto Cervantes, además de colaborar en A vivir Andalucía de la Cadena Ser.

El Espíritu Eterno es una novela compuesta por diversos ingredientes: muerte, amor, guerra, historia, que la hacen ser completa, interesante e intrigante en todo momento.

Desarrollándose la historia en un escenario Parisino interno en la Segunda Guerra Mundial, la protagonista, una joven huérfana malagueña, que vive inmersa en sus recuerdos, se verá envuelta en una historia llena de conflictos, tensiones, miedo, odio, amor. Todo ello unido a una misteriosa investigación que desvelará el mayor secreto que podrían esconder los textos bíblicos.

La escritora ha conseguido una lectura que levantará inquietud e incertidumbre en sus lectores. Además de lograr transmitirnos cómo los españoles y en concreto los andaluces, vivieron un acontecimiento tan dramático, como fue la Guerra Civil.

También es un libro que nos acerca a un tema tan transcendental como la muerte, haciendo que nos cuestionemos ésta, e intentando darle una respuesta.
En definitiva, es una historia para hacernos pensar.

EL ESPÍRITU ETERNO

RESUMEN: EL ESPÍRITU ETERNO

Marina es la protagonista de esta historia. Se trata, de una joven malagueña que vive en la época de la segunda guerra mundial, y que tras la sucesión de la guerra civil española se exilia a Francia, habiendo fallecido sus padres y seres queridos. Allí, trabaja como pianista, siendo muy admirada por todo el que la escucha en sus conciertos. Vive sola, contando sólo con algunos amigos como Deray, Pablo Picasso, y Pancho, el perro de un amigo fallecido.
La vida de la joven ha estado marcada por el sufrimiento, derivado de una guerra, en la que fallecieron millones de personas. Pese a esto, lucha por la vida, dedicándose únicamente a sus dos pasiones: leer, y tocar el piano; y viviendo en sus añorados recuerdos.

Un día, después de salir de uno de sus conciertos, Marina es acosada por unos militares, que al llegar el señor Kennen, un comandante nazi, la dejan tranquila, mientras Marina sale huyendo.
A partir de ese momento, el comandante empezará a sentir una obsesión por la muchacha, atraído por su belleza, que lo llevará a investigarla, hasta conseguir secuestrarla y violarla.

Marina, cuando es atrapada, y se ve encerrada en la casa del militar, intenta escapar varias veces, pese a que allí ha podido ver y hablar con el espíritu de su madre. En la última de las ocasiones, hiere al comandante, asestándole una puñalada en el pecho, pero la joven, no es capaz de dejarlo abandonado, y llama a un médico, ayudándolo a salvarle la vida. Desde ese momento la joven, no vuelve a escaparse, pero esta vez es raptada por el militar Keitel, que también empieza a sentirse atraído por ella, llevándosela hasta su casa. Kennen la libera de allí, y le dice que ya no la va a obligar a quedarse con él, que es libre de hacer lo que quiera.

Entonces Marina, regresa a su hogar, y una noche en la que toca un concierto en honor al fallecido hijo de su amiga Deray, los militares de Keitel entran y comienzan a disparar a todos, matando a la amiga de la joven malagueña. La pianista consigue huir, llegando a parar al Sacre Coeur, sorprendentemente las puertas de la basílica se abren, y al otro lado está Kennen.
El comandante, tiene en este lugar a varios traductores investigando sobre unos manuscritos antiguos encontrados: el evangelio de María Magdalena, un texto referente a las Batallas de las Navas de Tolosa, otro de Leonardo Da Vinci, y por último, el diario de la Condesa de Báthory. Todos ellos tiene en común un hecho, y es que en todos se habla de una mujer llamada Lilith, que es pelirroja y bella, y que es el opuesto de Dios, el diablo, la muerte.
El comandante se los cede a Marina para que los lea, yéndose a la casa del alemán.
Allí, el espíritu del padre de Marina aparece y charla con ella, hasta que llega Kennen, quién esa noche duerme con ella, pero no siente la necesidad de obligarla a nada. Ella por su parte, ya no le tiene miedo a ese hombre.

Al día siguiente les llega la noticia de que tienen que huir, debido a la maldad de Keitel y sus hombres, que quieren atraparlos. A Marina se le ocurre que se pueden alojar en la casa del señor Bruni, un anciano, que hacía unos días había fallecido. Allí, piensan pasar la noche, en la cuál, sus cuerpos se unen, esta vez por el deseo de ambos. Pero, la tranquilidad les queda interrumpida cuando Esteban, el esposo de Deray, que también es militar, entra en la casa, y los descubre. Marina, le pide que no los delate, pese a que Esteban siente que la joven a deshonrado a su reciente fallecida esposa.
Ese mismo día, los traductores de Kennen les entregan las últimas traducciones a éste, que se empieza a enfermar. El militar, que no ha dejado de pensar en todo este tiempo en los textos, llega a la conclusión de que Lilith es Marina, puesto que además de su parecido físico con ésta, todos sus seres queridos se acaban muriendo. Al principio la joven no lo quiere aceptar, pero tras la muerte repentina del comandante, Marina que regresa a España, se da cuenta de que sí, de que el espíritu de Lilith, de la muerte, va con ella.

sábado, 12 de diciembre de 2009

ARTÍCULO ELEGIDO

ARTÍCULO ELEGIDO:

De los tres artículos el que más me ha gustado es el de La Opinión de Málaga, porque la historia me resulta muy conmovedora y porque a parte de hacer una crítica de la poca solidaridad que hay en la sociedad en la que vivimos, hace una crítica del sistema sanitario de España, que es terriblemente penoso, sobre todo, en cuanto a la lentitud con la que atienden a los pacientes, ya que las largas esperas en las salas de los hospitales son algo de lo más común en nuestro país.
Además, me llamó también mucho la atención el hecho de que empiece el artículo criticando a los políticos, sin miramientos ningunos, y esto es algo que creo que puede enganchar mucho al lector.
Asimismo, pienso que la historia puede servir para que la gente se de cuenta de que debemos tener un poco más de caridad humana y de compasión a la hora de ayudar a quien más lo necesite y no darle de lado como si de un perro se tratase.

En cuanto a los otros dos artículos, el de Arturo Pérez Reverte, también me ha gustado bastante, sobre todo por la naturalidad con la que se expresa, llegando a utilizar en numerosas ocasiones palabras que pueden resultar malsonantes para algunos, como “mamón” o “gilipollas”, y que no se suelen ver escritas por ahí, pero que sin embargo todo el mundo alguna vez las ha empleado. Al leer el artículo parece como si estuvieras escuchando al autor que lo ha escrito, y resulta entretenida y amena su lectura.

Y en lo referente al artículo de Antonio Gala, creo que la extensión no importa a la hora de decir si es mejor o peor, pero en este caso, en comparación con los demás, no me ha llenado, ya que considero que el tema que trata es de gran importancia como para mojarse un poco más, y dedicarle más líneas.

Por último, decir, que otra de las razones por las que he elegido el primero como el mejor, quizá sea la de más peso, es porque la historia me puede resultar más cercana, dramática, común, y en definitiva me ha llegado más al corazón.

sábado, 5 de diciembre de 2009

ARTÍCULO

PASIÓN INCOMPRENDIDA:

Domingo 29 de Noviembre, siete de la tarde, calles semidesiertas.
Millones de personas permanecen inmóviles ante una pantalla, pendientes de 22 hombres que corren, luchan, persiguen a una pelota; cada movimiento, cada patada, cada saque hace que sus corazones se encojan.
Los nervios fluyen a flor de piel, como si se tratase de un hecho que fuese a cambiar el curso de sus vidas.
Pasan los 90 minutos, cesa la tensión. Y queda: alegría, gozo, orgullo, para algunos, y tristeza, desilusión, rabia, para otros. Al día siguiente todo seguirá igual.
Es increíble la expectación que crea el fútbol, pero aún es más increíble, el dinero que se mueve con este deporte. ¿Es normal, pagar por un jugador de fútbol 94 millones de euros? ¿Es normal que ganen 7,8 o 9 millones de euros al año?
Parece que sí, que para gran parte de la población esto es normal, pese a que el sueldo medio de una persona en España sea de 20.438 euros al año.
Aparentemente nadie se queja, nadie se cuestiona si verdaderamente los futbolistas tienen tanto mérito como para tener un salario tan descomunal. Y además, todos contribuyen a que este salario siga en aumento, pagan por verlos jugar, compran sus camisetas, y por si fuera poco, les regalan coches de lujo.
¿Es que acaso no tiene más valor el médico que salva una vida? ¿O las personas que abandonan su hogar para ir a países tercer mundistas a ayudar a los que más lo necesitan?
Estos son solo dos ejemplos de los muchos que se podrían dar, pero la realidad, es que la gente no se para a pensar en esas cosas.
Para la población lo único importante es que gane su equipo favorito, y poder presumir ante los demás de que su equipo es el mejor, y de que los demás no valen para nada, y si pierde, echarle la culpa al árbitro.
¿Cómo pueden tenerle tanta afición a algo que no les da ningún beneficio y que a veces lo que les ocasiona es un gran disgusto? Tal es el disgusto que pueden llegar a las manos, numerosos son los aficionados que llegan a enfrentarse, peleándose, machacándose unos a los otros, simplemente porque son de equipos rivales.
¿Es lógico esta clase de comportamiento? Para mí, es de no razonar mucho.
Mientras, los millonarios jugadores, presidentes de clubes, y demás entes del gremio, viven rodeados de lujo, sin tener que preocuparse por la hipoteca que tienen que pagar, o porque no pueden llegar a fin de mes, o porque están en paro y sus ahorros no les dan para vivir.
No, estos nos son problemas de ellos. Ellos, se plantearán qué nueva mansión se van a comprar, a qué fiesta asistirán esta noche, o si son presumidos como Beckham, cuál será el próximo corte de pelo que se hagan.
Y todo, por darle patadas a un balón.
Yo no digo que no tengan mérito, que todos los deportistas lo tienen, pero que ganen tantos millones, eso, no es justo. No es justo para un mundo que está inmerso en una crisis, para un mundo en el que hay muchas personas que se mueren de hambre.
Pero es la cruda realidad, aunque numerosas personas no la vean; porque para muchos si que puede ser excesivo el sueldo de políticos, modelos, actores, cantantes, etc.; pero la mayoría no critica el sueldo de los futbolistas.
Es una pena, que ni siquiera se lo cuestionen, ojala algún día lo hagan, y el mundo sea un poco más justo.

jueves, 19 de noviembre de 2009

RESUMEN

RESUMEN: JUAN CACHO O UN CACHO DE JUAN

El libro narra la historia de Juan, un treintañero, licenciado en matemáticas, que vive solo, en un apartamento muy descuidado y sucio, fruto de la vagueza del susodicho, que intenta llegar a fin de mes con el sueldo que recibe dando clases particulares a su vecino, y en verano dando clases en una academia.
La vida de Juan se basa en ir al humilde bar que hay cercano al edificio donde vive, donde se encuentra con su mejor amigo llamado Vicente, y apodado el Dedos por su habilidad para robar; dar las clases, e investigar en su hipótesis sobre la teoría del caos.
Se aproximaba el verano, y como todos los años, el señor Jaime contrató a Juan para dar clase particulares en su academia, que aunque recibiría un sueldo muy bajo, a éste le venía de perlas pues no tenía ni un duro.
Allí, Juan conoció a una joven que le encantó, llamada Amparo; le encandilaron sus ojos, su pelo, su cuerpo, y que resultó ser su alumna, a la cuál le llevaba más de 10 años, pero en la que no podía dejar de pensar.
Un día, el presidente del bloque, donde el protagonista vive, convoca una reunión de vecinos, en la que desafortunadamente su esposa sufre un infarto y muere. El suceso, tiene inquietada a Nieves, la hermana del vecino al que Juan le imparte clases, y ésta convence a Juan para que entre los dos, investiguen al viudo señor Odón. Entonces, tras conseguir coger la copia de las llaves que la portera tiene de la casa del presidente, entran a la casa de éste, y cogen unas cintas y CDS, en los que aparece el señor Odón, practicando sexo con diferentes mujeres, entre ellas, se encuentra Amparo, quien unos días antes, se había pasado por casa de Juan y también lo había hecho con él, pero debido a que sufrieron un pequeño percance, la joven salió muy enfadada de casa de Juan. Además, había videos realizados en los lavabos de señoras, donde se veía a jóvenes, haciendo sus necesidades. A Juan les resultaban familiares pero no sabía de qué.
Cuando vieron estas grabaciones, los dos se quedaron muy sorprendidos, no se esperaban aquello del señor Odón, ni de la joven Amparo.
Después de ocurrir esto, sucede, que unos inspectores van a visitar la academia en la que Juan trabaja, y le dicen al dueño, Jaime, que tiene que realizar obras habilitando el espacio para que las personas discapacitadas puedan entrar, de manera que éste, le pregunta a Juan que si conoce a alguien que se las pueda hacer, y piensa en su mejor amigo el Dedos.
Cuando éste se dispone a hacer la obra se encuentra una cámara oculta en el baño de señoras, y muy alarmado acude a contárselo a Juan. Él, ya sabía que su jefe, era el dueño de una página Web que se dedicaba a mostrar videos pornográficos, y de señoras en los lavabos, realizados con cámaras ocultas, porque antes, aprovechando que el señor Jaime, no estaba en la escuela, había encontrado en uno de sus cajones varios CDS que contenían una serie de direcciones de páginas de este tipo.
Lo único que le faltaba por confirmar, era la sospecha de que la mujer del señor Odón no había muerto por casualidad, sino por que fue asesinada. Y dándole vueltas a la cabeza, llegó a la conclusión de que la fallecida había sido envenenada por su esposo la misma tarde de la reunión, cuando les puso un té a todos.
Cuando Juan se dio cuenta de esto, inmediatamente llamó a la policía, y fue a desenmascarar al señor Odón.
Después de esto, la historia era muy sonada por todo el barrio, todo el mundo hablaba de Juan, como si se tratase de un héroe. Y Amparo, le escribió una carta diciéndole que sentía haber salido enfadada de su casa, y que era un hombre sencillo, tierno y algo tonto, pero encantador. Por lo demás, Juan siguió con su vida, tan normal como siempre.

PRÓLOGO:

La historia de este libro, no es una historia de personajes fantásticos a los que les suceden cosas extraordinarias; es una historia de gente común, a la que le ocurren cosas normales, del día a día, de la vida misma, por ello muchos de los lectores se podrán sentir identificados con alguno de sus personajes; los hay buenos, los hay malos, los hay honrados, los hay traperos… los hay, para todos los gustos.

Además de disfrutar de una trama entretenida, lo que más enganchará al que se presté a leerla, será el humor del que goza. Les aseguro que podrán reír a carcajadas.

No es el típico libro que se hace pesado, tan pesado que a veces dan ganas de saltarse las páginas, y llegar hasta el final.

Es una historia ágil, con la que no da tiempo a aburrirse, pues su lectura es amena y divertida. Cuando menos se lo espere lo habrá terminado, y probablemente no dirá: ¡Oh! ¡Gracias a Dios que ya se acabó! sino que querrá leer más.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

MICRORELATO:

Era una noche como otra cualquiera, María había salido de sus clases de dibujo y se dirigía hacia su casa. Caminaba de prisa, como siempre, atravesando aquellas oscuras y solitarias callejuelas que le hacían sentir miedo, inseguridad,pues por aquel lugar no había un alma.
A veces , sentía que alguién la seguía, pero luego penssaba que sólo eran imaginaciones suyas. Aquella noche, las imaginaciones dejaron de ser imaginaciones, para convertirse en realidad.
María se detuvo y se dio la vuelta, no había nadie, pero vio una sombra, una sombra que se escondió detrás de la esquina.
Comenzó a correr, aterrada, desesperada, hasta que llegó al portal de su casa. Allí se quedó más tranquila, buscó las llaves, y de repente sintió que una mano le tapaba la boca, y le agarraba. Sintió como la hoja de un puñal se adentraba en su costal. Sintió, como la sangre corría por su cuerpo. Sintió un dolor inmenso que la derrumbaba, que no la dejaba ni gritar. Sintió que sus ojos se cerraban. Sintió que su corazón dejaba de latir.